Chihiro hace un viaje en tren a través de ese extraño mundo, junto a «Sin cara», un extraño espíritu que aterrorizaba la casa de aguas termales e intentaba ganar el afecto de Chihiro y de Boh, el bebé gigantesco de Yubaba, quien ha sido transformado en un ratón por Zeniba. El grupo llega la casa de Zeniba, donde descubren que ella es amistosa y que fue Yubaba quien colocó la maldición dentro de Haku. Sin embargo, el amor de Chihiro y los cuidados que le dispensa rompen el encantamiento. Zeniba hace una cinta especial a Chihiro para que se recoja el cabello, demostrándole que sus amigos están con ella, así como para protegerla, y le ofrece a Sin cara permanecer en el hogar de ella como su ayudante. Haku, ahora recuperado, lleva a Chihiro de vuelta a la casa de baños termales, explicando que Yubaba volverá a sus padres a la normalidad y que permitirá a los tres abandonar dicho lugar, todo a cambio de devolver a Boh. Mientras viajan en la forma de dragón de Haku, Chihiro recuerda que su madre le había contado que una vez cuando ella era pequeña se había caído en un río. Chihiro pasa la prueba y obliga a Yubaba a cumplir su promesa de dejarlos ir a ella y a su familia. Haku la escolta a la entrada del mundo humano, diciéndole que sus padres la están esperando en el otro lado, pero en el trayecto le pide que no mire hacia atrás. Al final la familia se reúne y vuelve a su automóvil, el cual ahora está polvoriento; para así continuar el camino a su nuevo hogar.
Brent Stirton, un profesional afincado en Nueva York y que trabaja para Getty Images, Newsweek, National, Geographic, CNN, The New York Times…una calidad excepcional en la factura de las fotos unido a un don de la oportunidad genial. Recomiendo la vista de su página con detenimiento por qué vale mucho la pena, aunque aviso que algunas imágenes son realmente duras. He escogido para mostraros un reportaje sobre las tribus del Valle de Omo, en África y dos más sobre lo que él llama Photojournalism, una miscelánea sobre los conflictos en todo el mundo.
Brent Stirton estaba con ellos el 22 de Julio de 2007, cuando comenzó la pesadilla y cuenta conmocionado ante la cámara como vio a los guardabosques trasladar a hombros los restos de los gorilas asesinados a través de la selva: “No esperaba sentir lo que sentí. Pero era como si lo mejor de África estuviera presente en esa procesión: la mayor dignidad en medio de la tragedia. Fueron unas muertes tan despiadadas…”
Sus trabajos se han publicado en numerosas revistas y también es colaborador de grandes organizaciones, ayudando a denunciar las distintas problemáticas que nos rodean, uno de los galardones para Brent Stirton fue de los Asuntos Contemporáneos por la impactante historia de un grupo de personas que trasportaban el cadáver de un gorila en el Congo.
Desde el enero pasado he ido haciendo acopio de cómics, novelas gráficas y libros varios que he ido leyendo, si cabe, no he comprado todo lo que hubiera deseado debido a ciertos gastos puntuales que tenga actualmente y que me están desangrando poco a poco. Supongo que tarde o temprano comentaré algo al respecto, en una de esas etapas de recomendación de cómics me encontré una crítica atrayente del superhéroe británico Jack Staff creado por Paul Grist, ediciones Recerca se portó de maravilla y publicó un tomo completo con todos los números recopilados de este curioso superhéroe intemporal. Por 20 euros, un precio muy válido teniendo en cuenta como está el mundillo, uno puede disfrutar de montones de aventuras en blanco y negro, vampiros, superhéroes, personajes clásicos del cómic británico y algo de cachondeo a lo largo de un porrón de hojas, más de 150 (más de 300 páginas). Todo se centra en el retorno de Jack Staff al mundo moderno después de desaparecer a finales de la segunda guerra mundial, nuestro personaje protagonista deberá hacer frente a vampiros templarios, ladrones de guante blanco retirados y criaturas inmortales además de dar de lado a los cuerpos de seguridad, periodistas cotillas y cazadores de vampiros. Muy recomendable y con guiños al lector.
El dominio que tiene este hombre del negro es abrumador, juega con él a las mil maravillas, lo integra en la historia, hace que todas sus figuras pivoten en torno a él. Es imposible sentirse decepcionado con el dibujo de este hombre ya que es bastante fluido y se nota que disfruta con su trabajo.
Vladimir Flórez conocido por el seudónimo de Vladdo (nacido el 22 de diciembre de 1963 en Armenia (Quindío)) es un caricaturista, periodista (de oficio, no de profesión) y dibujante crítico colombiano. Desde antes de cumplir un año y hasta 1976 vivió en la ciudad de Armenia, Quindío, por lo que se declara ‘cuyabro’ de corazón. “Uno no es de donde nace, sino de donde aprende a manejar su primer lápiz”, dijo en alguna oportunidad. Desde 1986, ha realizado diversas caricaturas de contexto crítico en las revistas de prensa y periódicos de su país, lo que le ha valido premios y reconocimientos como el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar, el Premio Nacional de Periodismo del Círculo de Periodistas de Bogotá (1988), el premio de Excelencia otorgado por la Sociedad Interamericana de Prensa (2002) y en dos ocasiones el premio de excelencia de la Society for News Design, por su trabajo como diseñador de periódicos. Desde 1994, publica la sección Vladdomanía en la Revista Semana.
En 1997, creó su personaje femenino llamado Aleida, una ácida interpretación de la conducta femenina; que critica de manera férrea al género masculino, y que acude al cinismo para burlarse de sí misma. Sus viñetas cuentan con entusiastas seguidoras y seguidoras no sólo en Colombia, sino también en otros países de América Latina y en el mundo entero. Vladdo dirige un periódico mensual de sátira política llamado "Un Pasquín" el cuál es de distribución gratuita.
Vladímir Propp (1895-1970), un famoso erudito ruso, estudioso de la narratología (ciencia dedicada a la estructura narrativa) que, a partir de cien cuentos populares rusos se dedicó a establecer una serie de análisis de los componentes más básicos e indestructibles de los cuentos populares, hallando la matriz principal de todos ellos. A esta serie de análisis se les conoce comúnmente como “las funciones de Propp”, puesto que son una serie de puntos habituales en las narraciones de este tipo, es decir, los cuentos tradicionales y populares. Pero, como veremos a continuación, no solamente es aplicable a este tipo de historias, sino a cualquier narración que podamos encontrar hoy en día, desde novela, película, cómic, videojuego, serie de televisión, serial radiofónico… casi cualquier cosa que nos propongamos analizar. Pero sobretodo, se centran en las funciones del protagonista o los personajes que pululan por dichas historias. Para análisis de otros elementos, tales como la importancia del escenario para el desarrollo de la acción o las tradiciones culturales en los mitos literarios, deberemos a recurrir a otros autores, puesto que Propp se centra casi exclusivamente en dichas funciones.
Vladimir Propp amplió Formalista ruso acercamiento al estudio de la estructura narrativa. En el acercamiento formalista, las estructuras de oración fueron analizadas en elementos analizables, o morfemas, y Propp utilizó este método por analogía para analizar los cuentos de hadas rusos. Analizando una gran cantidad de cuentos populares rusos en sus unidades narrativas más pequeñas, o narra temas, Propp podía llegar una tipología de estructuras narrativas. Analizando tipos del carácter y de la acción, Propp concluyó que había 31 narra temas genéricos en el cuento popular ruso. Mientras que no todos estaban presentes, él encontró que todos los cuentos que él había analizado exhibido las funciones en secuencia invariable.